Haciendo recuento

La Buttony Sweat terminada, gracias a los botones tan bien elegidos por MiColegui.
Un té afrodisíaco servido como DiosManda, en una compañía estupenda, da gusto comprobar que los años pasados de un número importan poco, sobre todo si hay que restar.
El café, mi café.. porque siempre que tomo café te echo de menos, o será que cuando te echo de menos siempre me apetece un café.
Y Troylo, que después de unos meses de entrenamiento, ha aprendido a mirar al Sur.
Cuatro momentos disasociados, que están fresquitos en la memoria, por lo que puedo saborearlos aún, y disfrutar incluso de las sensaciones que propiciaron.
Y ahora en la cabeza la obligación de pasarme horas frente al pc con el Autocad.
Y ahora en el cuerpo las ganas de seguir ante una ventanita parpadeante, y saciar curiosidades.
Y ahora en el corazón, la necesidad asignar “1” o “0” a cada bit de memoria.
….Y ahora en mí, el miedo.

6 opiniones en “Haciendo recuento”

  1. El miedo se ha quedado ahí en una esquinita y mucho más pequeño. Con poco esfuerzo, seguro que terminas de echarlo fuera. Un empujoncito y ya ni se lee, porque se despeña por el margen. Y si no se lee, no existe.
    Muchos besos.

  2. Hola Que hermosaaaaaaa!!! 😀 que lindos momentitos Violeta =D oie oie pues fijate que te quería contar que ultimamente me ha dado por surcir jeje bastillas o costuras rotas y pues jeje no se me siento tan bien jaja como que me relaja y me gusta a lo mejor debería hacerte segundas con el patch!! bueno bueno jeje la verdad cuando surcia pense mucho en ti y en lo que sientes cuando patcheas jeje tengo que escribirte un mail!! hay cosas que contar te quiero amiga te mando un abrazo.

  3. ohhhhhh
    qué bien poder poner cara a Troylo…
    qué cosa más bonita!!!

    obligaciones, ganas, necesidades… y el miedo el último y bien chiquito…

    mil besos… de lunes, de martes ya

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *