A finales de Junio, estuve tejiendo un par de calcetines para my roommate.
Tejer calcetines, en Junio, en Canarias, no parece muy de persona cuerda, que bueno, no es lo que voy a pensar aquí, que creo que eso lo tengo descubierto y asumido ya.
El motivo era que my roommate partiría hacia Irlanda a finales del mismo mes. Y yo pensé que para las tardes-noches de bed and breakfast, tanto los calcetines como un buen libro, le iban a venir de perlas. Y así ha sido.
Esta foto la he recibido hoy mismo.
Y me ha dado como cosa. Mis calcetines dando vueltas por esos mundos de Dios, y my roommate también.
Ha sido un año fácil. Hemos convivido sin problemas, aunque yo siento que yo le he dado más trabajo a él que él a mí. La realidad, es que al menos para mí ha sido fácil, divertido, y muy agradable. Hoy, con cansancio, sueño, algún cotilleo… le echo de menos.
Me he acostumbrado a que al llegar a casa, alguien pregunte cómo ha ido el día.
Querido roommate, te espero en Septiembre!
no te preocupes que el tiempo pasa volando y en un abrir y cerrar de ojos vuelves a tener a tu roommate contigo.
ah! y los calcetines chulissimos!
petons
Yo estoy tejiendo dos mantas a la vez para distintas personas, pero ahora con "esta" calor soy incapaz de coger las agujas…
Saluditossssssssss
Calcetines y añoranza… mmm… qué combinación!!! Creo que esa Katia la tengo por algún cesto de mi casa…
ademas el roommate es joven, guapo, simpatico…..yo tambien le echaria de menos….:-)))