Yo, que soy de ciencias y he estudiado todos estos movimientos terráqueos, sufro un choque neuronal al ver las cosas aparecer por donde deben desaparecer,
es como ver venir el Sol por el Oeste.
Entonces, no hay caso, ante la imposibilidad de entender semejante acontecimiento,
el aislamiento se hace necesario.
La Garita, Earl Gray, y el italiano este que me tiene abducida,
aunque no de forma consciente y a gusto.
aislate nena, pero no mucho que tampoco va bien 😉
abrazos encadenados,
SIONA