La semana se me ha pasado entre certificados y noches sin dormir. Podría decir aquello de que la vida es lo que pasa mientras esperas a que se registren los CEE en la sede de Industria, pero he decidido hacer cosas útiles mientras espero. También he decidido que no me voy a frustrar, ni a impacientar, ni tampoco a enfadar.. Tengo un largo recorrido por delante para domar estos sentimientos que se despiertan de forma incontrolada cuando lidio con ciertas cosas que son ajenas a mi voluntad. Y ésto, se puede hacer extensible a cualquier ámbito de la vida.
Así que una vez más, mis manos, me salvan del atolladero, y de que en cualquier momento compre en el mercado negro un lanzallamas y haga mi propia versión de un Día de Furia.
A lo que iba, y contextualizando: Emma y las galletas. Le vuelven loca las galletas, de cualquier cosa, de cualquier marca, pero aunque le encanta el chocolate, prefiere las galletas sin él. Así las cosas, me fui a la red (ay! gran aliado) y me dispuse a navegar por cuanto blog de galletas encontré. La cuestión es que está taaaaaan de moda el tema galletil, que me encontré envuelta en una cantidad no manejable de blogs y recetarios preciosisimos.. pero poco comibles en mi opinión. Todas las galletas parecen objetos de decoración, con ingredientes extrañísimos: que si cremor tártaro, glicerina comestible, albúminas… y millón de colorantes. Todo ello para hacer algo que le llaman glasa, y que como digo quedan galletas de cine, pero que no se ajustan a lo que yo estaba buscando. Yo quería la receta de una galleta, básica, rica, natural y a ser posible con no demasiado trabajo. Tengo que decir que probé varias recetas con resultados varios. Desde desastrosos, a trabajosos, a algunos poco reconocibles como galletas. Seguí en la búsqueda, y al fin la encontré. Como su propia autora la llama: la receta definitiva de galletas Y sí, es cierto, es LaReceta de galletas. Emma está encantada con estas galletas. La cuestión es que yo quería que comiera galletas sanas, dentro de lo que puede ser sana una galleta, pero que se coma 60 galletas en unos días no me parece muy sano, que digamos. En fin.
Mientras, nos hemos puesto a coser y a cortar murciélagos, fantasmitas y calabazas. Por aquello de aprovechar los tiempos de espera en la preparación de las masas, y de ir cambiando la casa con las fiestas que van llegando. Y llegando poco a poco y muy tímidamente, está el cambio de tiempo. No me atrevo a llamarle Otoño aún, porque aquí no se pone todo naranja, no llueve, y ni siquiera hace frío. Pero los días son más cortos, en el mercado hay otras plantitas, de las que nos hemos traído una albahaca y perejil, y las calabazas están tiradas de precio. Pero lo más que me gusta de esta época, a parte de que puedo (ahora sí) celebrar que los años van pasando, son las flores de algodón que me trae mi tío el mecánico-agricultor. Son tan delicadas, y a la vez tan fuertes que me tienen enamorada. Ya tengo dos bolsitas de algodón natural, que algún día hilaré.. Lo que me recuerda que esta tarea sigue pendiente.
De acuerdo.
Me gusta mucho el algodón "en flor" y muy pocos las galletas decoradas.
Igual que no me gustan las tartas Fondant, si, preciosas pero no aptas para mi paladar.
Aquí el Otoño no lo veo por ningún lado y ya… Como que lo necesito.
Pasen un feliz domingo. Me encanta leerte!
Una actitud como la tuya son las que te hacen triunfar en la vida.
Esperar y saberlo hacer es un verdadero triunfo ante la vida.
Me encantan estos momentos de hacer galletas, yo también las hago con la ayuda de mis sobrinos que son una maravilla.
Y para la noche de todos los Santos también me dedico ha hacer muñecos terroríficos para decorar la casa, a ellos les encanta incluso mi sobrino pequeño que están en preescolar se ha llevado uno de "mis monstruos" para decorar su clase.
En fin es lo que toca en este mes que la los que nos gusta el terror y las fantasmadas nos gusta taaaaanto.
Besos y ánimo mientras esperas !!!
Emma estara encantada con las galletas en forma de hoja, con esos moldes que me traen un montón de recuerdos….
Qué ganas de probar esas galletas. Tengo que hacerlas!
Para comenzar a hilar te recomiendo empezar con lana, ya que el algodón es más difícil por tener fibras más cortas.
Besos a las dos
Por una Plataforma Anti Galletas con Chocolate!!! Apoyo a Emma totalmente.
🙂
Vicent.